Gaiman y Camarones lograron el reconocimiento de Pueblos Auténticos por Turismo de Nación.
Los atractivos, historia y presente de Gaiman y Camarones fueron incluidos en el libro «Pueblos Auténticos», editado recientemente por la Secretaría de Turismo de la Nación.
Ambos destinos, junto a otras 16 localidades de todo el país, integran el programa que busca poner en valor la identidad de pueblos con características únicas, promoviendo la apropiación de la comunidad local y la revalorización del patrimonio natural y cultural.
La inclusión de Gaiman y Camarones en el plan tuvo el impulso y el apoyo del Ministerio de Turismo y Areas Protegidas, que encabeza Néstor García. Ambas localidades «se caracterizan por conservar su identidad e idiosincrasia, plasmadas en diferentes aspectos relacionados con su patrimonio natural y/o cultural, su arquitectura, tradiciones, gastronomía, paisaje, historia, religión, artesanías, y el origen de sus pobladores», indica el programa lanzado en 2017.
«UN ORGULLO»
«La inclusión de Gaiman y Camarones no sólo es un orgullo sino que ya está fortaleciendo la promoción y el desarrollo turístico de los destinos. En ambas localidades la inversión de Nación está permitiendo pintar fachadas e instalar cartelería, de acuerdo a criterios establecidos por especialistas de diferentes áreas, en conjunto con las comunidades y la participación de los municipios y del Ministerio. Ser un Pueblo Auténtico implica una distinción nacional que también llama la atención de los turistas extranjeros», explicó García.
Para enaltecer las características únicas y distintivas, su patrimonio inmaterial vinculado a historia, fiestas, tradiciones, producción artesanal, gastronomía tradicional y otras manifestaciones que den cuenta de la identidad local, en sintonía con municipios y el Ministerio de Turismo y Areas Protegidas se realizarán obras estratégicas y mejoras de servicios y conectividad. «El objetivo es fortalecer el desarrollo turístico de las localidades desde la implicación de las propias comunidades», completó el ministro.
«La torta galesa no es cuestión solo de ingredientes y tiempos pacientes. Tiene que ver con una tradición que servía a los expedicionarios que la llevaban como comida en sus incursiones tierra adentro; con manos inmigrantes que la cocinan con devoción; y mesas donde el recuerdo de Gales está sumamente vivo aunque el valle del río Chubut sea un escenario tan distante del que acunó a los inmigrantes», señala el libro en el capítulo sobre Gaiman. «La mesa es un festín de aromas, sabores y colores heredados. Cada receta se replica con sabiduría y con ingredientes frescos.
En el exterior, las casas de té convidan también con jardines cuidados repletos de flores. Hay que dejar de lado el almuerzo y prepararse para el deleite en una de las seis casas de té galés del pueblo», agrega el texto.
«En Camarones, la estepa patagónica sale al encuentro del mar. O viceversa.
La mística del pueblo se comienza a tejer con los exploradores pioneros cuando en el siglo XVI el español Simón de Alcazaba y Sotomayor tocó estas costas con la intención de establecer la gobernación de Nueva León. En el pueblo el protagonismo se lo lleva el mar y los rasgos portuarios que acompañan su horizonte lejano.
Esta geografía enmarca a la población, con su fisonomía de casas de chapas coloridas, veredas desde las que todos se saludan al paso y un almacén de ramos generales donde acodarse a conocer las novedades del día», se lee en el apartado sobre Camarones.
El texto recomienda la visita a la pingüinera del Area Natural Protegida Cabo Dos Bahías, la gastronomía local de frutos de mar y el cordero característico, el Museo de Perón y, entre otros atractivos, la Fiesta Nacional del Salmón. Y una foto de «Casa Rabal» fue incluida en la tapa del libro «Pueblos Auténticos».