Las comidas típicas desde 1816 que todavía se consumen en la Argentina y siguen como favoritas son locro, empanadas, carbonada criolla, o simplemente asado a la parrilla o a la cruz. Por cierto existen variantes que responden a usos y costumbres de cada zona aún así respetan un lista de ingredientes básicos.
Desde mayo de 1810, los argentinos ya habían empezado su batalla para alcanzar la libertad. La conocida Revolución de Mayo, una serie de eventos masivos de aquel tiempo, dio paso para que el 9 de julio de 1816 fuera declarado el día de la independencia
Estos platos típicos fueron influenciados por los inmigrantes provenientes de España, Italia y el Reino Unido. Los italianos introdujeron la pizza y una variedad de pastas, los españoles llevaron las mantecas y los ingleses llevaron la tradición del té.
Las comidas típicas de esa época eran la sopa de arroz y de fideos, el asado (que todavía se consume en el país), el locro, las empanadas, la famosa carbonada criolla y la mazamorra hoy no tan mencionada
Veamos algunas recetas de los platos más consumidos pasados los años aunque con variantes según la región. Pero todos igualmente ricos.
LOCRO
Es el favorito entre los tradicionalistas de las comidas típicas, este suculento guiso es ideal como preámbulo de una buena siesta. Para prepararlo, hay que poner en remojo la noche anterior el maíz partido y porotos. Poner a cocer lentamente ambos en la misma agua de ablande, junto a las patitas de chancho y los cueritos cortados chicos, durante una hora y media a dos horas; hasta que el maíz y porotos estén tiernos (pero al morder que tengan resistencia), si ve que falta líquido, agregar agua hirviendo y continuar la cocción.
Agregar el resto de carnes, chorizos, panceta, achuras cortados en trozos y el mondongo en cuadraditos, hacer que rompa el hervor, despumar; dejar cocer lentamente otra hora más; antes de añadir las verduras, sacar las carnes y cortar en trozos pequeños; luego si se añaden las verduras cortadas en trozos chicos y dejar el tempo necesario para que todo esté bien cocido y espeso.
Mientras freír la cebolla de verdeo picada fina con la grasa colorada (se prepara la grasa de pella con el pimentón en el fuego y se deja hasta que la grasa quede colorada, cuidado que no se queme, sino tomara feo sabor), sacar y echar un chorrito de agua fría.
Servir en platos hondos con una cucharada de cebolla de verdeo y la grasa colorada.
CARBONADA
Dicen los menos detallistas que no hay vajilla fina que le gane a comer directo de la fuente. Para eso hay que elegir un zapallo inglés o japonés, serruchar la parte de arriba para que quede una olla con su tapa, vaciarlo de semillas y asarlo una hora en horno moderado. Se puede untar el interior con manteca y azúcar para que quede más gustoso.
El siguiente paso es hervir cuatro choclos cortados en rodajas de 3 o 4 centímetros. Luego se dora media taza de arroz y en una olla aparte se empiezan a mezclar los demás ingredientes: se fríe la cebolla picada, los dos tomates pelados sin semillas y medio kilo de carne en cubitos. Se le agrega sal, pimienta, una cucharada de azúcar y un cucharón de caldo y se lo cuece 20 minutos.
Después de ese tiempo se agregan los choclos y el arroz y se cuece 10 minutos más a fuego lento. Una vez cocido, el relleno en el zapallo y se calienta en el horno de nuevo.
TAMALES (Tucumanos)
Esta receta es trabajosa pero gustosa. Una vez preparados pueden congelarse para otro día, basta con hervirlos 20 minutos antes de servirlos.
Primero se mezcla un kilo de harina de maíz y dos kilos de zapallo anco cocido y deshecho en una olla. En una cacerola grande se ponen medio kilo de grasa de vaca, media cucharada de pimentón, dos cucharadas planas de sal, media cucharadita de comino molido y cuatro cucharones de caldo. Cuando hierve esta mezcla se la vierte sobre la harina de maíz con anco y se cocina 10 minutos sin dejar de revolver.
Para hacer el relleno hay que freír en medio kilo de grasa de vaca medio kilo de carne asada cortada en cubitos, tres cebollitas de verdeo picadas, media cucharada de pimentón, una cucharadita de comino, sal y ají picante.
Para armar los tamales se cruzan dos chalas secas y se ponen dos cucharadas de maíz en el centro, sobre las que se agregará un poco del relleno, pasas de uva y huevo duro picado. Se tapa con dos cucharadas más de maíz y se envuelve como un paquetito que estará atado con hilo grueso. Se hierven 20 minutos en una olla de agua con sal y se sirven en chala.