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Colonia Carlos Pellegrini – Corrientes

Colonia Carlos Pellegrini

El otoño en Colonia Carlos Pellegrini, una opción para descubrir el ambiente natural del Iberá. La localidad correntina tiene una oferta de 20 posadas, hosterías, cabañas y un camping municipal, que en conjunto tienen capacidad para albergar a más de un millar de turistas.

Entre calles de arena fina, humedales ricos en vegetación y una imponente laguna que parece querer abrazarla, la localidad correntina de Colonia Carlos Pellegrini, portal Este de los Esteros del Iberá, ofrece en otoño un variado abanico de hospedajes y atractivos para escapar los fines de semana a un ambiente natural.

Tras recorrer 80 kilómetros de ripio y cruzar un puente metálico bullicioso, Pellegrini se presenta como un poblado donde el turista quedará inmerso un ámbito apacible de clima cálido y contacto con la naturaleza que lo rodea, ya que muchas posadas permiten el avistaje de carpinchos, yacarés, ipacaás e infinidad de aves, desde las mismas galerías de las habitaciones.

Con más de 20 posadas, hosterías, cabañas y un camping municipal, que en conjunto tienen capacidad para albergar a más de un millar de turistas, las ofertas otoñales comprenden desde la simple contratación del alojamiento hasta la adquisición de paquetes completos que pueden incluir hasta dos excursiones por día.

Los costos van desde 300 pesos diarios por pasajero, en la modalidad alojamiento simple, hasta más de 1.300 con pensión completa y excursiones, según el establecimiento elegido.

Respecto al régimen de pensión, la media incluye desayuno y almuerzo, mientras que la completa agrega merienda y cena, en menúes fijos que cambian a diario y donde la gastronomía local es protagonista a través de platos típicos, postres y dulces regionales.

Para quienes opten por paquetes sin pensión, un completo restaurante de precios accesibles y con un variado menú a la carta permitirá al viajero interactuar con la gente del pueblo.

Los establecimientos disponen de paquetes turísticos que incluyen hasta dos actividades diarias, entre las que se destacan la navegación con avistajes por la Laguna Iberá y sus arroyos, cabalgatas por el pueblo y márgenes lacustres, paseos diurnos en carro y nocturnos a pie o en camioneta, y recorridos por los senderos Carayá, del Cerrito y del Monte.

Los cultores de la pesca con mosca podrán practicarla con devolución de ejemplar en proximidades del puente de acceso y el Camping Municipal.

En lo referente a calidad del alojamiento, un relevamiento realizado por Télam dio como resultado que las posadas ofrecen en su totalidad, con mínimas diferencias, los mismos servicios, algunas con detalles de mayor confort que otras, que no afectan la generalidad y uniformidad del servicio ofrecido.

Consultada sobre la falta de aire acondicionado en la mayoría de los alojamientos, Estrella Losada, presidenta de la Cámara de Turismo del Iberá (CTI), manifestó que «es por una decisión conjunta tomada por los socios que tiene que ver con el medio ambiente» y consideró al servicio «sólo necesario, pero no indispensable, durante los meses de enero y febrero».

La visita de Télam, a principios de abril y con temperaturas que oscilaban entre los 22 y los 31 grados, confirmó los dichos de Losada: en cada establecimiento el tipo de construcción (paredes de adobe, galerías techadas y la amplia circulación de aire en las habitaciones) permitió una estadía confortable, sin necesidad del uso de climatización eléctrica.

En relación a las comunicaciones, como en casi toda la zona de los esteros los servicios de Wi Fi son, por regla general, bastante deficientes.

Sobre el particular, no se debe echar tinta sobre los albergues, ya que el servicio es provisto a través de repetidoras, con señal proveniente de ciudades alejadas.

Es de destacar también que algunos establecimientos no poseen televisión en las habitaciones, y en algunos casos, en todo el establecimiento.

Para arribar al destino por vía terrestre la conexión de las principales ciudades argentinas tienen como punto convergente a Mercedes, debiéndose transitar desde allí por la ruta provincial 40 -cuyos 80 kilómetros finales son un complicado tramo de ripio- con vehículo particular, transfer, remís u ómnibus local.

En tanto, la conectividad aérea con trasbordo en la capital correntina insumirá un recorrido terrestre de 360 kilómetros, para lo cual hay que tener en cuenta que los servicios no están coordinados, por lo que se tendrán demoras adicionales.

Desde la Cámara de Turismo de Iberá (CTI) de recomienda a los viajeros no llegar sin reserva previa, sobre todo en los fines de semana largos, como ocurrió el pasado de Semana Santa, en el que se ocupó el 100 por ciento de sus plazas hoteleras.

Además, y es un dato que hay que tener presente a la hora de decidir llegarse hasta el destino, señalaron que el pueblo no dispone de cajeros automáticos, por lo que recomiendan llevar dinero en efectivo.

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