Argentina se coronó campeón por primera vez en la historia de la Copa Mundial Fútsal de la FIFA que se desarrolló en Colombia, tras imponerse ante Rusia.
El combinado albiceleste derrotó a Rusia 5-4 y se consagró campeón por primera vez en su historia de la Copa Mundial Fútsal de la FIFA, que tuvo como país anfitrión en esta ocasión a Colombia. La cita orbital más importante de su categoría estuvo marcada en esta edición por grandes sorpresas, los equipos denominados ‘chicos’ se crecieron y dejaron por fuera a las selecciones favoritas para quedarse con el título.
En esta ocasión, la supremacía brasilera se acabó en los cuartos de final cuando fueron eliminados por Irán, una de las selecciones revelación del torneo y que finalmente se quedó con el tercer puesto tras derrotar desde el punto penal al quinteto luso liderado por la estrella de fútsal, Ricardinho, quien tuvo que conformarse con un honroso cuarto lugar.
Final inédita
El partido que cerró la octava edición de este campeonato mundial fue histórico, pues Brasil y España eran hasta ahora los protagonistas de los mundiales fútsal. Sin embargo, en Colombia 2016, la historia cambió y en la última instancia fueron argentinos y rusos los que impusieron su juego para disputar finalmente el título que acreditaría a uno de los dos como nuevos campeones del mundo.
El primer tiempo fue una batalla táctica. Los dos apostaron a la presión alta y continua para evitar transiciones fáciles, al mismo tiempo que plantearon su ataque a partir de un pívot definido. En ese duelo, Rusia pareció algo más seguro, pero una vez que no logró resultados con su ataque posicional, abusó de las salidas largas, una situación que Argentina supo controlar. Aunque Eder Lima, tras dos rebotes en el área, abrió el marcador para Rusia, los argentinos tardaron apenas 26 segundos para empatar a través de Alamiro Vaporaki.
Los dirigidos por Diego Giustozzi ganaron en confianza. Seguros con el balón, incomodaron a los rusos a tal punto que llegaron al límite de faltas con 3 minutos por jugar. Una situación que aprovechó Leandro Cuzzolino para anotar el 2-1 de segundo penal sobre el cierre de la primera etapa.
Sufrimiento y gozo
El rápido empate de Lima en el complemento podría haber hecho dudar a Argentina, pero fue todo lo contrario porque dos apariciones de Alan Brandi, en apenas 1´25′ posteriores al 2-2, le permitió quedar 4-2 arriba en el resultado.
Sergey Skorovich, estratega ruso, probó una variante tras otra: un pívot definido, dos pívots y dos alas ofensivas, remates de larga distancia pero no le alcanzó para superar al quinteto sudamericano.
Cuando faltaban 6´ los dos llegaron al límite de faltas. Argentina tuvo otro segundo penal a favor, pero esta vez Gregory Zamtaradze, quien reemplazó a Gustavo para la ejecución, frustró a Cuzzolino.
Con la afición dividida, los minutos finales fueron de altísima intensidad. Rusia apeló al arquero jugador con todo el riesgo que eso conlleva, y lo pagó cuando Constantino Vaporaki, desde su campo, anotó el 5-2.
Rusia jamás tiró la toalla. Descontó por intermedio Dimity Lyskov y un segundo penal de Lima la puso a tiro del empate con 19 segundos por jugar, pero Argentina pudo defender el último balón y se quedó con la gloria, logrando así por primera vez en su historia el título que lo adjudica como los mejores de esta disciplina.
Irán se quedó con el tercer puesto
Irán le ganó por penales 4-3 a Portugal, tras empatar 2-2 en los 40´ minutos reglamentarios, y se subió al tercer lugar del podio. El partido se disputó ayer en juego previo a la gran final en el coliseo el Pueblo de Cali.
Como no se sacaron ventajas hasta al final, el encuentro debió definirse en los penales. Allí se agigantó la figura del arquero suplente iraní Sepehr Mohammadi, quien detuvo dos remates portugueses. El gol del triunfo lo anotó Madji Javid, e Irán desató su merecido festejo, tras ser uno de los protagonistas del campeonato.